Bossaball, el deporte que mezcla fútbol, voleibol y capoira que está arrasando en las playas
Bossaball nació hace 15 años en España con la idea de crear un deporte lleno de espectáculo en el que los participantes realizan todo tipo de acrobacias al mismo tiempo que intentan que el balón pique en el campo contrario para así obtener puntos del mismo modo que sucede en el vóley-playa pero con reglas distintas que lo convierten en un deporte extremadamente atractivo de ver.
El auge del Bossaball ha llegado hasta tal punto que se ha ido expandiendo por el mundo entero y cuenta con equipos en sitios tan variopintos y dispersos como Holanda, Bélgica, Colombia, Brasil, Argentina, Alemania, Turquía, Egipto o España, en donde nació todo.
Reglas de Bossaball, ¿en qué consiste este deporte?
Para jugar al Bossaball se deben conocer muy bien las reglas de este deporte. En primer lugar es necesario conocer que un mismo equipo solo puede darle cinco toques al balón antes de que pase hacia el otro lado. En segundo lugar es fundamental conocer que existen dos posibles toques, el de vóley y el de fútbol y esto es muy relevante ya que en función de cuál de los dos toques se hagan el máximo de puntos posibles a obtener pueden ser unos u otros.
De esta manera, con un toque de vóley, es decir, cuando la pelota toca en los brazos o antebrazos del jugador que lanza, se pueden obtener un punto si la pelota toca el campo oponente y tres puntos si además golpea en la cama elástica del equipo contrario.
En el otro caso, cuando se trata de un toque de fútbol, se obtienen puntos de la misma manera, con la diferencia de que si el balón toca el campo son 3 puntos y si además es en la cama elástica dichos puntos aumentan hasta los cinco.
Historia del Bossaball
Filip Eyckmans es un hombre belga que vive en España desde hace décadas. Durante la década de los 90 mientras trabajaba como mánager de varios bandas musicales recorriendo el mundo entero pudo apreciar en las playas de Brasil como se producía una curiosa mezcla entre fútbol, vóley, capoeira y con una gran presencia de música y baile.
Fue así como un día, se le ocurrió un simpático juego que combinaba lo mejor del fútbol y del vóley-playa, utilizando camas elásticas y creando un juego extremadamente divertido, no solo de jugar sino sobre todo de ver.
Fue así como entre los años 2003 y 2005 trató de llevar a cabo su sueño de poder convertir en realidad este deporte, para lo cual empezó a promoverlo de todas cuantas formas pudo. Obtuvo la patente del deporte y empezó a vender material que permitían practicarlo por los cinco continentes.
La expansión del Bossaball
El Bossaball es uno de los deportes minoritarios que más ha crecido en los últimos años. Sin embargo, aún no cuenta con una liga oficial, ni siquiera cuenta con un campeonato del mundo. ¿A qué se debe esto? Principalmente, el motivo por el que este deporte no ha crecido más ha sido por los impedimentos que ha puesto su propio creador para poder tener control económico de cualquiera que desee practicar Bossaball.
De esta manera, mientras abrir el deporte al público favorecería a que en muy pocos años el Bossaball pasase a ser de dominio público practicándose en cualquier rincón del colegio, la realidad, en cambio, es bien distinta y en casi veinte años de historia del deporte aún no se ha creado ninguna liga federada oficial y los pocos torneos oficiales creados se cuentan con los dedos de una mano. Quizás esto pueda hacer reflexionar a su creador de si prefiere que su idea se expanda mucho más al dejar de limitar su uso o si por el contrario prefiere seguir sacando partido económico de todo aquel que quiera jugar al Bossaball.